UNA NUEVA PERSPECTIVA PSICOLÓGICA
Por: Marianela Briones – Psicóloga (Egresada de la UCINF)
Aunque es difícil escribir en primera persona y siendo protagonista, he pensado que era indispensable hacerlo en esta oportunidad. Todo esto, para entender la actitud y las decisiones personales que he encauzado a lo largo de mi vida. Creo que mirando hacia atrás en el tiempo se encuentran razones y muchos fundamentos de nuestras situaciones actuales.
Soy Marianela Briones, psicóloga de profesión, egresada de la Universidad de Ciencias de la Informática en Santiago de Chile. Me aventuraré a relatarles algo de mi llegada a este mundo de la mente de las personas, y que de alguna forma comprendan la labor de esta página Web.
Aquellos años de principios de los ochenta ya de por sí eran caóticos en lo social, político y con restricciones propias de la etapa que pasaba mi país. Yo deseaba ser psicóloga, pues me había interiorizado en mis tiempos juveniles en el colegio José Domingo Caña de Santiago y posteriormente en el Liceo Experimental Gabriela Mistral que el estudio de la mente era fascinante. Mi idea era esa precisamente, estudiar la psiquis interna de las personas, aquel laberinto enigmático que nos mantiene consciente de un mundo real y otro que nos conduce por un delgado hilo de Ariadna, y que muchas personas caen y no vuelve jamás al mundo que todos conocemos.
Una grave enfermedad, una bronconeumonía me deja en lo que denomina “muerte clínica” y creo sinceramente que este detalle de mi vida fue crucial para tomar decisiones muy importantes para mi futuro.
Eso fue lo que ocurrió realmente. Mi mayoría de edad y la decisión tomada en mi juventud me hicieron ingresar a la Universidad, y es entre los años 1990 y 1996 que desarrollo esta carrera, la cual comencé junto con 60 personas y luego sólo terminaríamos la carrera unos 6 colegas.
Mi paso por la universidad fue el de una alumna normal. Aunque debo decir que siempre tenía ideas propias. Había adquirido algunos conocimientos y pautas de actuar con otras personas y por experiencias personales que sería largo de explicar aquí, pero sí mantenía mis buenas notas, aunque generalmente los profesores no concordaban muchas veces con mis proyectos.
Mis pasos me guiaban y veía otros caminos plausibles a solucionar problemas, presentía que “faltaba algo” en esos estudios teóricos que me suministraban, y que vuelvo a repetir, yo cumplía con mis buenas calificaciones bastantes superiores a la media normal.
Fueron pasando los años y la metodología enseñada no era de mi total aceptación, aunque disfrutaba en la investigación, y en talleres de experimentación, y es allí donde afloraba toda mi esencia de una futura psicóloga.
Estoy segura que muchos no estaban de conforme con mi actuación, pero no porque yo fuera conflictiva, sino por algunos procedimientos que yo no seguía en la aplicación de ciertos tratamientos a pacientes, y que de alguna forma incomodaba a algunas personas. Por ejemplo, no aplicaba ciertos tratamientos en un número de meses determinado que yo sinceramente creía innecesario. Pensaba que existían caminos que acortaban resultados. Esto lógicamente ahorraba no sólo tiempo, sino también dinero al paciente y los resultados eran mucho más efectivos. Este asunto meramente económico debo decir tristemente, no era compartido por muchos de mis colegas, pues sus vidas estaban encaradas bajo un prisma totalmente diferente a los míos.
El tiempo me ha dado la razón. Cuando conocí en unos cursos al psicólogo Pablo Iguiñez en la Universidad Católica comencé hablar con él de “análisis funcional” bajo unas perspectivas totalmente nuevas y que me interpretaban mucho más que mis amigos corporativistas. La regresión hipnótica me abrió unas puertas impensables en el tratamiento de ciertos casos. Leer autores como Brian Weiss y Edgard Case me indicaron que mis pasos no estaban errados. Existía una corriente nueva de ver los problemas de los seres humanos y es así como me adentre más en prácticas que ahora están más cerca de una nueva medicina alternativa, que sin sustituir a la oficial, si da respuestas a muchos problemas que la ciencia oficial se les escapa. Convencida estoy, que ciertas facultades del ser humano permanecen dormidas en su interior o se han deteriorado con el tiempo, pero que con ciertos métodos actuales que yo estoy aplicando en pacientes jóvenes y también mayores, los resultados son de un porcentaje muy alto de éxito. Todo esto anterior, repercute en el bienestar del paciente y también cumple el cometido de simplificar ciertos tratamientos largos, tediosos y sobre todo muy costoso en lo económico, y que yo humildemente estoy aplicando con éxito en mi despacho de Santiago.
Hoy en día he creído necesario utilizar la tecnología para presentar mis trabajos y mis ideas, además de ofrecer un espacio para algunos amigos profesionales quienes también colaboran conmigo. Sólo espero que este esfuerzo sea en beneficio mutuo, que se traspasen aquellas barreras infranqueables del mundo moderno y podamos tener una vida más plena y rica en experiencias personales.
Entre las aplicaciones de terapias psicológicas la que más estoy empleando en estos momentos es la Hipnoterapia Regresiva enfocada principalmente al área inconsciente del ser humano.
Esta terapia consiste en cinco sesiones desarrolladas de la siguiente forma:
a.- Diagnóstico: Duración 45 a 60 minutos
Objetivo: Llevar a una hipótesis diagnóstica con la cual se va a trabajar con antecedentes, diagnósticos anteriores, evaluación, psicometría) etc.
b.- Hipnoterapia Regresiva: Consiste en realizar un trabajo hipnótico en el ámbito consciente, con el fin de experienciar los problemas y causas puntuales del paciente.
c.- Sellamiento: Consiste en realizar un cierre del trabajo anterior, marcando una limpieza inconsciente y entregando otra connotación al problema en cuestión.
d.- Programación: Luego de haber encontrado todas las debilidades del paciente se cambian por fortalezas que el paciente trae consigo y no han sido expresadas abiertamente.
e.- Programación 2: Se refuerza la programación y se realiza el cierre de terapia.
f..- Al no realizarse satisfactoriamente el cierre, se realiza una sesión colocando énfasis en el cierre.
El espejo.
Probabilidad de éxito: depende directamente del paciente con un 88 al 95% de éxito.
Otras técnicas alternativas que aplicó en mi despacho son los denominados “Cristales energéticos”
Consiste directamente en usar dos cristales energéticos con el fin de disminuir la ansiedad atacando directamente al sistema nervioso central, el centro de la ansiedad.
Se colocan dos piezas detrás de cada rodilla, esta pieza es un cristal que se materializa a través de la energía y su uso es un depósito de energía con el fin de frenar el impulso eléctrico proveniente directamente del SNC
Dichos cristales se cargan directamente con energías una vez a la semana, asegurando disminuir la ansiedad y cómo consecuencia dejar de comer, fumar, etc...
Utilidad de este tratamiento: Bajar de peso, dejar de fumar, alcoholismo, conducta inapropiada.